Los bancos continuaron incrementando la inclusión financiera y la actividad bancaria apuntaló las arcas del Estado con récords de recolección y pago de impuestos.
Durante 2018, año de recesión económica, en el sistema bancario se abrieron casi 5 millones de nuevas cajas de ahorro a personas físicas, un millón de cuentas de seguridad social y se entregaron más de 2 millones de tarjetas de débito adicionales. También se inauguraron nuevas sucursales de atención al público, superando las 4.600 sucursales en todo el país, llegando a más de mil localidades y con presencia en todas las provincias. Se agregaron, además, 1500 cajeros automáticos.
A marzo de 2019 se registran más de 56 millones de cajas de ahorro, casi 7 millones de cajas de ahorro por ayuda social y 13 millones de cuentas previsionales. Todas estas cuentas son totalmente gratuitas para los usuarios, no se cobran comisiones, ni poseen costos por depositar o extraer efectivo, sin importar la cantidad de veces que se opere.
Actualmente, todo argentino tiene la oportunidad y el derecho a la apertura de una cuenta bancaria, obtención de tarjeta de débito y acceso a banca digital (por computadora o teléfono), en forma gratuita y sin costo para las operaciones de transferencias, depósitos o extracciones. Esto ha generado que desde 2016 a la fecha se hayan abierto cerca de 11 millones de cajas de ahorro gratuitas, logrando que más del 80% de la publicación adulta tenga una cuenta bancaria, tarjeta de débito y acceso a la banca digital. Este proceso significa una verdadera democratización de la banca y las finanzas.
Por otro lado, el sector bancario es un importante proveedor de empleo de calidad y también en ese aspecto un factor clave de la inclusión socioeconómico. Este sector ofrece más de 100.000 empleos directos, a lo que se debe agregar la generación de empleo indirecto. A pesar de la crisis financiera de 2018, el sector bancario no redujo sus puestos de trabajo, ni hubo pérdida de poder adquisitivo para los empleados de este sector.
En lo que hace al aporte a la sociedad vía impuestos, los bancos y los usuarios han realizado contribuciones récords en 2018. Los bancos recolectaron y aportaron al fisco $ 234 mil millones en concepto del “impuesto al cheque” y pagaron 59 mil millones en concepto de impuestos a las ganancias ese año. Estos dos tributos en conjunto representan más del 8,5% de la recaudación tributaria total del país.
En materia de tecnología y desarrollo digital, la banca argentina ha sido la que más creció la región en los últimos tres años. En efecto, el sistema financiero aumentó un 55% la incorporación de tecnología y redes sociales, que incluye inteligencia artificial, incorporación con pagos QR, utilización de scoring, atención online robotizada y alianzas con las Fintech, según datos del informe anual sobre banca móvil y redes sociales que realiza la firma Latinia. De esta manera, queda evidenciado que los bancos continúan mejorando e innovando en los canales digitales, en respuesta a las demandas de los clientes que buscan en los servicios la inmediatez y la disponibilidad de operar las 24 horas todos los días del año. A modo de ejemplo, se destaca que más del 35% de los clientes de los bancos de ADEBA utiliza los canales digitales y han descargado más de 2.000.000 de Apps de sus respectivos bancos.
Por último, cabe destacar la contribución en materia de inversión social, a través de iniciativas de alcance nacional y acciones específicas. En materia de educación financiera, se desarrollaron programas individuales y en ocasiones en forma conjunta con distintas asociaciones civiles y gubernamentales. Los diferentes programas apuntan a la capacitación en cuestiones no sólo financieras sino también de apoyo a emprendedores, para facilitar y propender el mejor uso de los productos y servicios financieros, orientados a la toma de decisiones financieras responsables.